En Habic, las empresas asociadas están comprometidas con la sostenibilidad y la mejora continua. Por eso apuestan por la obtención de certificaciones de sistemas de gestión y de producto. Estas certificaciones son, a día de hoy, un aspecto fundamental que aporta numerosas ventajas y valor diferencial a las empresas. Sirven de incentivo para llevar a cabo procesos de mejora, tanto en sus productos como en sus servicios y gestión.

La acreditación de estas certificaciones es sin duda un valor diferencial en el mercado ya que, por un lado, mejora la imagen de la empresa y por otro, genera confianza entre clientes, consumidores, accionistas y autoridades competentes.

CERTIFICACIONES SISTEMAS DE GESTIÓN

ISO 9001: Gestión de la calidad del proceso adoptado por las empresas para asegurar que el producto / servicio prestado cumple con los requisitos deseados por el cliente.

ISO 14001: Gestión del desempeño ambiental de la empresa, demuestra un compromiso con la sostenibilidad ambiental de sus actividades, incluyendo procesos productivos, productos y servicios.

ISO 14006: Promueve la consideración de todos los aspectos ambientales en todas las etapas del proceso de diseño y desarrollo de productos a lo largo de su ciclo de vida, esforzándose por conseguir productos con el impacto ambiental mínimo posible.

ISO 45001: Gestión de la seguridad y salud de los trabajadores empleados en la realización del producto / servicio mediante el control constante y mitigación de riesgos para su seguridad.

ISO 50001: Ayuda a las organizaciones a implantar una política energética y a gestionar adecuadamente los aspectos energéticos derivados de su actividad, como son los servicios, instalaciones, productos, etc., lo que se traduce en un ahorro real y cuantificable del coste energético en las organizaciones.

CERTIFICACIONES DE PRODUCTO

EU Ecolabel: Etiqueta tipo I, promovida por la Comisión Europea. Identifica de forma voluntaria productos que tienen un impacto ambiental reducido a lo largo de todo su ciclo de vida. Para la concesión de esta etiqueta se tienen en cuenta entre otros impactos: el uso de los recursos naturales y energía; emisiones a la atmósfera, agua y suelo; deposición de los residuos; ruido y efectos sobre los ecosistemas.

Cisne Nórdico: Etiqueta tipo I, promovido por el consejo nórdico de ministros. Los criterios ecológicos están basados en el ciclo de vida del producto, incluyendo criterios como el consumo de recursos naturales y energía, las emisiones al aire, agua y al suelo.

Level: Etiqueta semi-tipo I para el sector del mobiliario, promovida por el FEMB. El proceso de certificación LEVEL® examina y evalúa no solo la elección de los materiales empleados en los productos y su fabricación, sino también el comportamiento social de la empresa, su consumo de energía y los impactos ambientales y humanos de los componentes químicos utilizados.

FSC: Etiqueta semi-tipo I, promovida por FSC. Garantiza una gestión forestal ambientalmente responsable, socialmente beneficiosa y económicamente viable para los bosques.

PEFC: Etiqueta semi-tipo I, promovida por PEFC. Fija objetivos vinculados a la conservación del ambiente, mejora de la productividad y promoción del desarrollo socioeconómico en el entorno rural a través de la gestión responsable de bosques.

Cradle to Cradle: Etiqueta semi-tipo I, promovida por el instituto Cradle to cradle. Evalúa en cinco categorías los efectos sobre la salud de las personas, el grado de reutilización de los materiales, el uso de energías renovables durante su fabricación, la gestión del agua y el comportamiento de las empresas que lo producen respecto al trato con sus empleados y con el medio ambiente.

EPD: Etiqueta tipo III, promovida por el International EPD System®. Una Declaración Ambiental de Producto (DAP) es un documento verificado, que recoge información sobre aspectos e impactos ambientales de un producto a lo largo de su ciclo de vida. Sirve como estándar de comparación ambiental entre productos similares.